Grandes patrimonios, criptomonedas y ‘fintech’, en el foco de Hacienda

Plan de control tributario 2019. La Agencia Tributaria intensificará este año el control sobre los grandes patrimonios, las ventas por Internet, las tecnologías ‘fintech’ y las criptomonedas.

La Agencia Tributaria (AEAT) intensificará este año el control sobre los grandes patrimonios, las ventas por Internet, las tecnologías fintech y las criptomonedas, según el Plan de Control Tributario 2019, en el que Hacienda asegura que el fomento del cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales de los contribuyentes será el centro de su actividad durante este año y los siguientes.

Según se explica en el plan, publicado ayer en el BOE, este año se producirá la implantación definitiva de una herramienta de gestión de riesgos tributarios, que sistematiza todos los existentes en la AEAT, crea colectivos de riesgo y permite un mejor seguimiento del resultado de las actuaciones de control llevadas a cabo por la Agencia.

A lo largo de 2019, Hacienda ampliará el número de contribuyentes con grandes patrimonios propuestos para inspección mediante esta nueva herramienta de selección. Además, el control sobre grandes patrimonios se verá reforzado este año con la nueva Unidad Central de Coordinación del Control de Patrimonios Relevantes.

“De esta forma, se afianza el control reforzado sobre grandes patrimonios mediante la utilización de cauces de investigación específicos para perfiles que así lo demanden”, señala Hacienda, que precisa que las características especiales de estos contribuyentes, que pueden tener una parte de su patrimonio en el extranjero, requieren el uso de mecanismos de análisis “sofisticados” para investigar y comprender los “complejos” entramados financieros y societarios controlados por los mismos.

Ya está trabajando la Unidad Central de Coordinación del Control de Patrimonios Relevantes (UCCCPR), que cuenta con amplias facultades y coordina las actuaciones de control sobre grandes patrimonios (ver EXPANSIÓN del 26 de diciembre). Esta oficina, cuyas competencias plenas están pendientes de aprobación en el BOE, da un giro copernicano a la investigación de patrimonios relevantes gracias a una herramienta de big dataque no pone límites a los contribuyentes que podrán ser objeto de comprobación: serán investigados por el nivel de riesgo fiscal que se les determine, y sólo subsidiariamente por el importe del patrimonio calculado. En cualquier caso, el Fisco pone especial atención en los patrimonios a partir de 10 millones.

En particular, Hacienda proseguirá perfeccionando los mecanismos internos existentes que permiten un rápido tratamiento de la información fiscal recibida de forma automática de la Administración fiscal correspondiente en el marco del CRS (Informe país por país), respecto de las cuentas financieras que se mantienen en el extranjero por contribuyentes con residencia fiscal en España.

Asimismo, la Agencia Tributaria tiene previsto continuar mejorando este año las herramientas existentes para explotar información de otra naturaleza, también obtenida de forma automática de otros países y jurisdicciones, como pueden ser rendimientos del trabajo o pago de pensiones, con la finalidad de evitar la ocultación de rendimientos obtenidos y patrimonios situados en el exterior.

También desarrollará actuaciones para verificar que las entidades financieras cumplen con sus obligaciones a la hora de identificar la residencia fiscal de los titulares de determinadas cuentas financieras.

Monedas virtuales

El plan de control tributario de 2019 fija también su atención en las tecnologías fintech, las ventas por Internet y las monedas virtuales. Así, Hacienda asegura que realizará un estudio inicial de las tecnologías fintech “para evitar que su despliegue altere el grado de conocimiento que la Agencia Tributaria mantiene sobre la actividad económica”, al tiempo que se analizan sus posibilidades para mejorar el servicio a los contribuyentes.

El plan contempla asimismo actuaciones sobre los nuevos modelos de distribución, en particular sobre el comercio electrónico, la llamada ‘triangulación de envíos’, en la que las ventas realizadas por una empresa son entregadas por otras, y “tiendas de tiendas” instaladas en webs.

Hacienda seguirá prestando atención a los nuevos medios de pago para avanzar en su control y propondrá medidas para establecer las mismas obligaciones a todos los intermediarios en los mercados financieros, y seguirán siendo objeto de control las actividades logísticas ligadas con el comercio electrónico.

En relación con los riesgos fiscales observados en las operaciones realizadas con criptomonedas, Hacienda analizará y explotará este año la información obtenida en 2018 que se requirió a los intermediarios de las operaciones realizadas con criptomonedas y estudiará la posibilidad de realizar nuevos requerimientos para obtener información adicional.

Fuente: Expansión