Cazalla recupera su vid. Bodega Colonias de Galeón

La Sierra Norte retoma su tradición vitivinicola con esta bodega.

Condiciones óptimas suelo pobre y pedregoso, y mejor altura y clima ecológicos. Sus caldos ya han recibido numerosos premios

Bodega Colonias de Galeón es una empresa con un gran espíritu emprendedor y comprometido, que viene desarrollando un proyecto vitivinícola en el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla desde 1998.

Esta comarca, se presenta como la gran desconocida incluso para los propios sevillanos. Y es que son muchas las incógnitas por desvelar y difundir de esta zona. Una de ellas es la gran tradición en el cultivo de la vid y elaboración de vinos que acumula. Durante los siglos XVI y XVII llegó a ser la principal comarca exportadora de vinos al Nuevo Mundo a través del Puerto de Sevilla. Las embarcaciones que viajaban a América ya lo llevaban en sus bodegas.

Cervantes ya aplaudía en sus obras la bondad y calidad de estos vinos, en obras como El licenciado Vidriera y habría que recordar que los vinos de Cazalla se sirvieron, junto a los de Borgoña, en la boda del emperador Carlos V con Isabel de Portugal.

Diferentes hitos llevaron a esta comarca al abandono de este cultivo, como la entrada de la filoxera en 1889 o la competencia de otras comarcas vitivinícolas mejor posicionadas estratégicamente como la zona del Condado.

Con todo ello, Elena Viguera y Julián Navarro decidieron abordar con gran ilusión el proyecto de implantar de nuevo el cultivo de la vid en la Sierra Norte, en Cazalla, en la parcela el pago Colonias de Galeón. Las características del terruño son óptimas para el cultivo de la vid: suelo pobre, pedregoso, laderas de pizarra, altitud media de 700 metros, fuerte oscilación térmica entre día y noche, bastante sol y suficiente lluvia, con excepción de los meses de julio y agosto.

Cultivan la viña de manera respetuosa con el entorno, desarrollando una agricultura ecológica certificada por el Comité Andaluz de Agricultura Ecológica, siguiendo algunos principios de agricultura biodinámica así como prácticas locales tradicionales, procurando seguir los ciclos naturales. Además mantienen un comportamiento coherente en la bodega, racionalizando el uso de los recursos como la energía, el trabajo o el agua. Los residuos orgánicos vuelven a la viña para ser compostados con estiércol de oveja, mejorando la capacidad de retención de agua y nutrientes en el suelo.

En 2002 se hizo la primera vendimia, estrenando la bodega en la que disponen de medios suficientes como para elaborar vinos tranquilos de calidad. “El sentido común nos decía que recuperar la actividad vitivinícola no era hacer el vino del pasado, hay que hacer vinos actuales y diferenciados, y para ello hay que usar la innovación”, afirman los creadores de estos caldos. Algunos de estos vinos son: Colonias de Galeón Maceración Carbónica (vino de cosecha); Colonias de Galeón Roble (crianza); Silente (reserva, vinos tinto; y Petit Ocnos Chardonnay (vino blanco con crianza en depósito sobre lías).

Han sido numerosos los premios nacionales e internacionales logrados por esta empresa, honores que reconocen el buen hacer y la calidad tanto del proceso de elaboración como de los vinos que resultan. Mención merece  la apertura de este producto al exterior de nuestras fronteras, comenzándose recientemente a exportar a Nueva York.

 

Fuente: www.vivasevilla.es