Ayudas para los autónomos que contraten a familiares como fijos

Los autónomos que contraten a sus familiares como indefinidos tendrán una subvención total de las cotizaciones sociales del empresario durante el primer año del empleo. Este beneficio se extenderá a la contratación del cónyuge, los padres, los hijos o, incluso, los cuñados, yernos y nueras. Para poder acogerse a la bonificación de las cotizaciones sociales será necesario que el empresario autónomo no haya despedido de forma improcedente en el año anterior y deberá mantener los contratos y la plantilla durante al menos seis meses.

Esta es una de las medidas de la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo, que entra hoy en vigor, después de que fuese publicada ayer por el Boletín Oficial del Estado. También entrará hoy en vigor el derecho del autónomo a poder cobrar toda la pensión mientras sigue trabajando después de cumplir la edad de jubilación, si tiene al menos un trabajador a su cargo. O la tarifa plana de 50 euros de cuota a la Seguridad Social para las madres que vuelvan a la actividad antes de dos años desde que cesó su negocio por maternidad, adopción o acogimiento.

La ‘tarifa plana’

Otras medidas entrarán en vigor el 1 de enero de 2018, porque están pendientes de los presupuestos. Así, la tarifa plana de 50 euros a la Seguridad Social se amplía desde los seis meses a un año para los nuevos autónomos o aquellos que no lo fueron en los dos últimos años.

Igualmente, los profesionales que trabajen en su casa podrán deducirse un 30% de los gastos de suministros, como el agua, la luz y el teléfono. Los autónomos podrán deducirse 26,67 euros diarios en el Impuesto sobre la Renta por gastos en comidas de trabajo, si desarrolla su actividad en España. Si se trata de comidas de trabajo en el extranjero la deducción asciende a 48 euros diarios.

La nueva norma también reduce a la mitad, durante el primer mes, los recargos para el empresario por retraso en los pagos a la Seguridad Social a la mitad. Así, en el primer mes pasarán del 20% al 10%. de la deuda por cotizaciones sociales.

Fuente: Expansión