Las grandes empresas informarán de sus transacciones a Hacienda cada 4 días

Desde 2017. La Agencia Tributaria lanza un sistema de gestión del IVA obligatorio para los 62.000 grandes contribuyentes que le proporcionará información de compraventas en tiempo real.

La Agencia Tributaria (AEAT) lanzará un nuevo sistema de gestión del IVA para grandes contribuyentes que les obligará a informar de sus transacciones comerciales cada cuatro días a partir de 1 de enero de 2017. Así lo anunciaron ayer Santiago Menéndez, director de la AEAT, y Rufino de la Torre, director del departamento de Gestión Tributaria, quienes subrayaron que se quiere incrementar los controles contra el fraude y reducir las cargas formales en el medio y largo plazo ya que, de entrada, exigirá un esfuerzo de adaptación al contribuyente.

El sistema, por el que la AEAT recibirá la información en tiempo real frente al decalaje de un año que media ahora en determinadas declaraciones, será obligatorio para 62.000 contribuyentes: grandes empresas –quienes facturen más de seis millones de euros–, grupos societarios a efectos de IVA e inscritos en el régimen de devolución mensual del impuesto (Redeme). Este colectivo representa el 80% de la facturación total de los sujetos pasivos de IVA. El resto de contribuyentes podrán acogerse voluntariamente y, si lo desean, renunciar al sistema al final de cada año. Este sistema no tiene relación alguna con el IVA de caja, explicó ayer Menéndez.

Los grandes contribuyentes deberán remitir el detalle de registro de las facturas (no las facturas propiamente dichas) –y tiques– que deben hacerse constar en los libros de registro. Estos envíos a la AEAT implicarán llevar los libros de IVA a través de la web de la Agencia, donde esos libros se irán formando con cada uno de los envíos.

La información a remitir incluirá los elementos esenciales de la factura expedida o recibida y, en el caso del registro de las facturas recibidas, la cuota deducible. Paralelamente, se eliminará la posibilidad de realizar asientos resúmenes (incluso en el caso de tiques) con la finalidad de facilitar el automatismo en el envío de los registros de facturación y, a su vez, mejorar las herramientas de control.

En este sentido, la AEAT señala que el nuevo sistema facilita el cumplimiento voluntario, ya que será más difícil defraudar o eludir el control si la Agencia dispone de lo que el contribuyente declara y el contraste con lo que informe el resto del colectivo.

Además, la Agencia señala que facilitará la detección del software de doble uso (programas informáticos que permiten la ocultación de ventas) y que se refuerza el control sobre las operaciones efectuadas a través de las cajas registradoras. El plan de ataque a las ventas en negro de pymes y autónomos que se avanzó en mayo parece haber quedado aparcado, extremo que Menéndez no confirmó.

Para realizar el envío de la información, los contribuyentes dispondrán de un plazo máximo de cuatro días desde el momento en que emitan o reciban una factura. En cualquier momento, accediendo a la web de la Agencia, el contribuyente podrá consultar tanto la información remitida por él mismo, como aquella imputada a través de información de terceros que también hayan facilitado los registros de forma electrónica.

Menéndez quiso resaltar ayer que el nuevo sistema reducirá cargas formales, al suprimirse la obligación de presentación de las declaraciones informativas correspondientes a los modelos 347 (información de terceros, anual), 340 (operaciones en libros registro, mensual) y 390 (resumen anual del IVA, anual).

Asimismo, se incrementa el plazo para las liquidaciones de IVA en diez días, con lo que las autoliquidaciones periódicas se podrán presentar en los primeros 30 días naturales del mes siguiente al periodo de liquidación.

Por parte de la AEAT, la comprobación será más rápida, con lo que podrá anticipar la comprobación y agilizar las devoluciones. Sobre todo cuando el cliente y el proveedor pertenezcan al colectivo, ya que la información nacerá ya cruzada.

Siguiendo un esquema similar al tradicional en el IRPF, la Agencia Tributaria pretende crear unos datos fiscales que podrá utilizar el contribuyente a la hora de presentar su declaración de IVA y, en último término, configurar un borrador de declaración del IVA.

Menéndez destacó ayer que el sistema entra en vigor en 2017 para que exista margen para introducir cambios normativos y adaptar los sistemas informáticos, un tiempo que no tuvieron los autónomos obligados a dejar el papel el pasado enero, una medida anunciada en septiembre de 2013.

Fuente: Mercedes Serraller. Expansión.