La Inspección de Trabajo refuerza la lucha contra los falsos autónomos y la desigualdad

La Inspección de Trabajo y Seguridad Social reforzará en los tres próximos años la lucha contra la precariedad laboral y la desigualdad laboral entre sexos. Así se desprende del Plan Estratégico 2018-2020, que aprobó ayer el Consejo de Ministros. Un plan con el que el Gobierno quiere cumplir su promesa electoral de mejorar la calidad del empleo.

En el primer caso, de lucha contra la precariedad laboral, la Administración aumentará los controles sobre la contratación temporal “injustificada, del empleo a tiempo parcial y de los contratos de formación”, según el plan estratégico.

Se trata de evitar que muchas empresas sigan encandenando contratos eventuales para cubrir puestos de trabajo de carácter indefinido y que deberían tener mayor sueldo. Con ello, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social también pretende reforzar sus funciones contra el abuso de horas extraordinarias.

Otra forma de combatir la precariedad laboral será “el refuerzo de las actuaciones” para controlar la actividad de las subcontratas y de las empresas multiservicio.

Precisamente, la decisión del Consejo de Ministros se produce un día después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, recibiese en el Palacio de La Moncloa a la organización de camareras de piso [de los hoteles]. El presidente se comprometió a estudiar un cambio en la regulación de las subcontratas y en la preeminencia de los convenios de empresa respecto a los sectoriales.

Falsos autónomos

La Inspección de Trabajo también aumentará su labor fiscalizadora sobre las plataformas de servicios, como las de los repartidores de comida y de paquetes, y “actuaciones específicas sobre los falsos autónomos”. En este último caso, las empresas obligan a los trabajadores a darse de alta como autónomos, para no pagar la Seguridad Social, pero, si quieren tener trabajo, les obligan a mantener la disciplina laboral de la compañía. Esta práctica está extendida por numerosos sectores de la economía. Otra actuación preferente de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social será el combate de la desigualdad laboral de las mujeres. “Asegurar el cumplimiento [por las empresas] de las normas de igualdad y no discriminación por sexo, con campañas específicas”. Así, la Inspección “potenciará la supervisión de la brecha salarial y de la negociación colectiva para evitar cláusulas discriminatorias”.

Por lo tanto, el plan estratégico de la Inspección de Trabajo trata de complementar el diálogo que sobre estas cuestiones está manteniendo el Gobierno con los empresarios y los sindicatos.

Precisamente, dentro del programa, el Ejecutivo y las comunidades autónomas crearán el Organismo Estatal de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Es un tipo de agencia que sustituirá a la actual Dirección General que está dentro del organigrama del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

Además, dentro de este organismo el Gobierno creará la Oficina Nacional de Lucha contra el Fraude. Uno de sus objetivos será mejorar la colaboración, y el cruce de información, con otros organismos del Estado para combatir la irregularidad laboral. Así, trabajará con la Agencia Tributaria, las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad Social; la Fiscalía General del Estado y los tribunales.

Fuente: Expansión