España tendrá 76 jubilados por cada 100 trabajadores en 2050

Informe OCDE sobre el ‘panorama de las pensiones’. La organización plantea al Gobierno que estimule la prolongación de la vida laboral tras cumplir la edad de jubilación, sin limitar la cuantía de la pensión.

La OCDE alertó ayer a España del ritmo de envejecimiento de su población y de la amenaza que ello supone para la viabilidad del sistema público de pensiones. Así, por detrás de Japón, España ocupa el segundo lugar de la clasificación mundial en esperanza de vida, con una media de 83 años, y en la tasa de dependencia. Es decir en la relación entre mayores de 65 años y trabajadores en activo, comprendidos entre los 16 y 64 años. Una persona en activo significa que tiene trabajo o lo busca por todos los medios, que está en le mercado de trabajo. No es un cotizante, que significa que, efectivamente, está trabajando y cotizando a la Seguridad Social.

El informe de la OCDE sobre Panorama de las pensiones en el mundo, calcula que, en 2050, en España habrá 76 jubilados por cada cien personas activas. Es decir que habrá 1,3 en edad de trabajar por cada retirado. Muy lejos pues de la tasa de 2,1 cotizantes por pensionista, la base mínima necesaria para, según la Seguridad Social, garantizar el sistema de pensiones. Actualmente, en España hay 30 pensionistas por cada 100 personas en activo. Es decir 3,3 activos por cada persona retirada. Por este motivo, “el paulatino envejecimiento de la población presiona a la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones”.

Pero, además, el club de los países más desarrollados del mundo advierte de que si no hay reformas, para 2050 la primera pensión equivaldrá al 82% del último salario. Es decir que, pese a los recortes ya realizados en el sistema de pensiones, la llamada tasa de sustitución se mantendrá como hasta ahora y 20 puntos más que la media de la OCDE, que es del 63%.

El informe también destaca que el “persistente y elevado nivel de paro y la alta tasa de empleo temporal, con el 26% de los asalariados, debilita los derechos de pensión para muchos trabajadores”. Por lo tanto, la OCDE resalta que “sigue siendo clave [para el futuro del sistema de pensiones] aumentar las tasas de empleo de los trabajadores de mayor edad”. Sobre todo, porque la edad efectiva de jubilación en España, más allá de la edad legal, “se ha estancado en los 62 años”. En realidad, la edad efectiva está en los 64,3 años.

La cuantía de la pensión

La OCDE no hace propuestas concretas para España, pero sus advertencias insinuan las recetas. Por ejemplo, la organización advierte de que España está entre los siete países “que limita la cuantía de la pensión” a los que siguen trabajando tras cumplir la edad de jubilación. Por ejemplo, con el retiro a tiempo parcial. Cuando el empleado trabaja por la mañana, con su salario a tiempo parcial, y cobra la pensión por la tarde.

La OCDE sugiere que una persona pueda seguir trabajando el tiempo que quiera, mientras cobra una pensión que premie todo el esfuerzo de cotización, sin poner techo a la pensión. “El incremento medio del 5,4% [en la renta] por año de retraso en la jubilación es inferior a la subida media del 7,7% en la mayoría de los países de la OCDE”, dice el informe.

Fuente: Expansión